Y lo que sobra de caramelos

No cambiarìa por nada los Jueves entre las 12.45 y 13.00. Es lo mejor que hay. Como tengo ese contraturno que me caga la semana (ademàs de educaciòn fìsica) y me tengo que despertar temprano, soy de estàr a las 11.40 para entrar al colegio. Entre que termina esa hora, y antes de que venga el profesor con el que empezarìamos las clases, hay unos 15 minutos en los que no faltan el 'corrè corrè corrè corrè'.

Siempre tenemos que cambiar de aula para irnos a la del segundo piso, porque la que generalmente usamos la estàn usando los de 2do de la mañana. Entonces, cuando la profesora de catequesis se va, como somos seres humanos, tenemos que comer, osea ir al kiosco. Es buenìsimo como apenas sale Peri, baja alguien unos pasos por la escalera, y cuando vamos a bajar todos se escucha el viene el precep viene el precep, y se escuchan todos golpes volviendo a subir corriendo, antes del aa no, se fue para tercero, bajen bajen bajen. Bajamos lo màs ràpido que podemos, cuando llegamos al patio 'la cara de rata la cara de rata, ràpido dale boluda', agachando la cabeza y corriendo lo màs ràpido que podemos (porque nos rompen la cara si nos ven saliendo del aula en clase. Supuestamente tenemos que estàr esperando al profesor que llega en cinco minutos) y cuando por fin llegamos somos como ochenta comprandonos de todo para ir volviendo de a uno, corriendo por todos los pasillos y/o el patio, pasando por el medio de 2do y 3ro de economìa, y ven pasar una persona agachada con comida en la mano cada diez segundos, llegamos lo màs bien, un hi 5 con el que habìa llegado antes, y siempre el ùltimo que sube dice -enserio- viene el precep viene el precep. CRISTIAAAAAAN ;) choque. Y cuando entra estamos todos sentados lo màs comùn, hablando de lo lindo que està el dìa = nadie se enterò de nada.

3ro B los jueves entre Peri y Tito, y mirando la pelìcula israelita es genial.